Alisa Fresnis cerró la puerta,
pero el extraño humo verde
se coló por debajo de la puerta.
Alfons Reverí también percibió
algo extraño de camino a casa.
Ese polvo verde...era impressionnantista,
pensó Franco Valieto mientras
lo esquivaba de un salto.
La bella Alisa se quedó dormida
al inhalar este polvo verde cinabrio y oliva.
Era un misterio, hasta que llegó Eponi Lupin,
El origen de todo estaba en una pequeña fábrica
de sensaciones impresionantes en Jonk Wong Wango Mimbo Wambo.